Desde el punto de vista comercial, China es tremendamente atractiva por su frenética actividad y por la enorme variedad de productos que produce. Algunos consideran al gigante asiático el proveedor mundial de cientos de productos, ya que el país cuenta con cientos de fábricas donde se trabajan productos muy dispares.
Qué se puede importar desde China
Realmente, no existen restricciones mundiales acerca de la importación de productos, pero cada territorio dispone de una legislación en materia de productos comerciales importados para garantizar que cumplen con los estándares de calidad.
Algunos de los productos más importados desde China son productos sanitarios como mascarillas y EPIs, productos textiles, maquinaria (con los moldes de inyección a la cabeza) y especias, así como aditivos alimentarios.
Lo que sí es fundamental es encontrar el proveedor que trabaje un determinado producto de la manera que más se ajuste a las necesidades del comprador, y precisamente por eso resulta primordial realizar una búsqueda exhaustiva de proveedores.
La elección de un buen proveedor se realiza en base a tres principios: la calidad del producto, el objetivo de ventas y la rentabilidad. Para que ambos vayan de la mano y la importación del producto sea beneficiosa para las partes involucradas en la transacción es necesario que se estudien estos aspectos y se negocie el importe de la compra de la mercancía, se establezca una relación entre la calidad del producto y su precio de venta a la empresa que lo compra.
Esto se lleva a cabo mediante un estudio de mercado, que permite valorar las estimaciones de inversiones y beneficios potenciales con la compra de un producto específico, determinar el volumen de los costes derivados de su compra y de los trámites aduaneros, así como los beneficios tras su venta.
Cómo importar desde China a España
Importar cualquier tipo de producto desde China a España es una labor que puede ser sumamente costosa por los requisitos burocráticos que es necesario satisfacer. Y es que, si se lleva a cabo por cuenta propia, recae sobre el propio comprador la localización de los proveedores, la verificación de su solvencia y la obtención de referencias y acreditaciones, la inspección de sus instalaciones y la ejecución de auditorías de calidad, así como la negociación del precio de la mercancía, la solicitud de muestras de producto, la negociación de la financiación y otros remates burocráticos, como la firma del contrato o el seguimiento de los plazos.
También será preciso llevar a cabo un control de calidad, gestionar el etiquetado y cumplimentar la documentación correspondiente de manera adecuada para evitar retrasos en la tramitación y los envíos.
Todos estos pasos se simplifican cuando se recurre a una empresa especializada en la gestión integral de servicios de importación como Bull Importer, cuyos servicios están indicados para empresas que desean comprar o fabricar productos en otros territorios sin preocuparse por la gestión ni por la tramitación de los procesos burocráticos que implica.
¿Es difícil importar desde China?
La complejidad asociada a una transacción comercial de esta magnitud trae consigo ciertas dificultades, sobre todo por el volumen de requisitos burocráticos y documentales que es necesario satisfacer.
Como acabamos de explicar, importar productos desde China a España puede resultar especialmente complicado cuando se lleva a cabo por cuenta propia, ya que es necesario no solo seleccionar cuidadosamente cada producto para tener la certeza de que se ajusta a las necesidades de la empresa, sino que es preciso entablar conversaciones para negociar el precio de venta final, formalizar el contrato de transportes y otros aspectos relacionados con la presentación de documentos y obtención de las correspondientes homologaciones.
Por tanto, se puede decir que importar desde China sin un equipo especializado detrás es bastante más complicado que hacerlo con su experiencia y asesoramiento. Y es que lo que hacen empresas como Bull Importer no es solo mover una mercancía determinada del punto A al punto B, sino gestionar por completo todo el proceso de importación para localizar los mejores proveedores, negociar con ellos los precios, supervisar los controles de calidad, solicitar muestras de producto y satisfacer los trámites burocráticos necesarios presentando la documentación necesaria en el plazo y la forma estipulados.
¿Es rentable importar desde China?
Toda importación busca en el fondo un margen de rentabilidad y cada transacción comercial internacional satisface varias necesidades económicas interfronterizas. No solo se trata de una compraventa entre dos empresas, organizaciones o entidades, sino que se trata de mover un volumen de mercancías constante para satisfacer los niveles de oferta y demanda de todo tipo de productos.
La clave para buscar el mayor índice de rentabilidad es encontrar un producto que logre posicionarse bien en el comercio de destino y que satisfaga las estimaciones de ventas, manteniendo el equilibrio en los precios de salida para mantener la estabilidad en el sector sin comprometerla posición de la competencia.
El nivel de rentabilidad de cada transacción puede variar en base a otros factores que puedan afectar al comercio internacional, como la emergencia sanitaria provocada por la propagación del SARS-CoV-2, y cuya aparición puede resultar más o menos imprevisible.
No obstante, para garantizar que la operación es viable y que existen márgenes de rentabilidad para la empresa compradora, a la hora de importar productos desde China a España es necesario elaborar un estudio de mercado y confeccionar un informe que tenga en cuenta las estimaciones de crecimiento. De este tipo de labores se encargan empresas especializadas en la gestión integral de procesos de importación, como la propia Bull Importer, que son de gran ayuda para simplificar todo el proceso y garantizar la superación paso por paso.